Qué necesitan los smartwatch para despegar en ventas

Este año 2014 ha comenzado presuponiendose por distintos medios como “el año de los wearables”, un término que no sólo incluye relojes inteligentes -smartwatch- sino que también se refiere a pulseras deportivas y algunas otras variaciones que, al fin y al cabo, están enfocadas en el mismo sentido. Sin embargo, la opinión de los usuarios es bien diferente, y estos hacen saber que no comprarán un smartwatch hasta que no sean los suficientemente “buenos”, es decir, útiles. ¿Qué necesitan los relojes inteligentes para despegar en ventas?
En menos de un mes tendrá lugar el Mobile World Congress 2014 en Barcelona, una de las ferias más importantes de la tecnología de consumo, y en esos días podremos conocer más de un wearable, entre los cuales es evidente que encontraremos algún que otro smartwatch. No obstante, ya son muchos los que están disponibles actualmente en el mercado y, a pesar de la variedad, el éxito ha sido prácticamente nulo en la mayor parte de los casos. Y es que, aunque los usuarios se ven atraídos por el concepto “smartwatch”, a la hora de la verdad los fabricantes no están logrando ofrecer lo que sí daría lugar a una gran demanda. Precisamente por eso, en esta publicación manifestamos algunas de las características que son “necesarias” para el mencionado triunfo de los relojes inteligentes en el mercado.

El precio de un smartwatch es importante, el Samsung Galaxy Gear es una prueba de ello

Por mucho que los fabricantes colmen de interesantes componentes y funciones sus relojes inteligentes, un smartwatch no puede triunfar bajo ningún concepto en el mercado si su precio supera una determinada barrera. Y, ¿cuál es esa barrera económica sugerida por el mercado? En realidad es complicado fijar un precio máximo de forma tan genérica, y sentenciar una cifra sería un error por parte de quien lo haga. No obstante, ha quedado demostrado que 300 euros no es el precio que los usuarios están dispuestos a gastar por un smartwatch -Samsung Galaxy Gear- capaz de ejecutar Android como si de un teléfono inteligente, que incorpora micrófono para ser utilizado como “manos libres”, o que además también ofrece una cámara rápida que sustituye a la de nuestro smartphone cuando la velocidad de una captura es lo principal.
Por lo tanto, después de todo esto, repetimos de nuevo que no hay un “precio clave”, puesto que otros relojes inteligentes con menor precio tampoco han encontrado la posición que buscaban desde su presentación. Y es que, si un reloj como el Samsung Galaxy Gear hubiese sido lanzado a un precio menor, ¿habría conseguido destacar en ventas alcanzadas en el mercado? No necesariamente, porque este no es el único factor que persiguen los compradores -usuarios-.

Debe ser compatible con muchos, muchos teléfonos inteligentes

Suena irónico. Este punto es obvio y a muchos sonará a “cachondeo”. Sin embargo, otro de los puntos que Samsung descuidó con su Samsung Galaxy Gear fue precisamente este. Por desgracia, el Samsung Galaxy Gear es un smartwatch que ofrece una enorme cantidad de funciones realmente interesantes para el usuario, pero la propia compañía es la que ha limitado el número de usuarios a los que puede llegar. No cabe duda de que Samsung es líder en ventas de teléfonos inteligentes y que sus Samsung Galaxy están verdaderamente extendidos, pero nadie -o prácticamente nadie- va a cambiar su teléfono inteligente para que sea compatible con el smartwatch que desea -en este caso el Samsung Galaxy Gear-.
Así pues, una de las características básicas de un smartwatch, sea cual sea, pasa por una amplia compatibilidad con smartphones sea también cual sea su sistema operativo -y la versión del mismo- o el fabricante. De esta forma, el fabriante del reloj inteligente se aseguraría también de no cerrar posibilidades a los compradores potenciales, y sería el usuario -como es lógico- quien decide si compra o no, sin impedírselo el fabricante por problemas de compatibilidad.

El diseño es fundamental, queremos un smartwatch con aspecto de reloj

Especificaciones técnicas de infarto, correcto. Todos estaremos de acuerdo en que un reloj inteligente, al igual que ocurre con los smartphones, cuanto más potentes es y más funciones nos ofrece, mejor. No obstante, la mayoría de usuarios no deseará ir con su reloj inteligente pareciendo un “geek”, sino que la intención es que pase desapercibido en este sentido y, sobre todo, que ofrezca el mismo atractivo por su diseño que un reloj convencional, no un aspecto tecnológico.
Además, es importante señalar que, aunque estemos tratando acerca de relojes inteligentes, la función principal de ese dispositivo de muñeca es mostrar la hora, y de ahí en adelante “todo lo que venga es bienvenido”. Y se hace hincapié especialmente en esto porque, por ejemplo, el Sony SmartWatch 2 incorpora una pantalla que difícilmente se ve correctamente cuando lo utilizamos a plena luz del día.

Aplicaciones, funciones… que sea útil

Después de todo lo que hemos señalado anteriormente, no puede quedar sin decirse que un smartwatch, al igual que nos ocurre con los teléfonos inteligentes que utilizamos a diario, necesita de un importante soporte por parte de desarrolladores terceros de software. Esto quiere decir, en definitiva, que comprar un reloj inteligente -smartwatch- tiene que ser sinónimo de ciertas garantías como, por ejemplo, ciertas aplicaciones “básicas” que hagan de nuestro dispositivo de muñeca algo útil. Ver la hora, vale. Ya habríamos cubierto lo básico con este aspecto, pero es evidente que si se opta por un reloj inteligente es por las opciones que éste ofrece con respecto a un reloj convencional.
Entonces, ¿qué puede hacer más atractivo a un smartwatch que a un reloj convencional? En primer lugar, que cumpla todos los puntos anteriormente señalados, pero por otra parte también tiene que ser verdaderamente complementario a nuestro smartphone, y esta complementariedad pasa porque el smartwatch se beneficie, entre otras cosas, de la conexión a redes móviles de nuestro smartphone y, obviamente, de sensores como el GPS y demás.

Los usuarios piden relojes inteligentes útiles

Como habéis podido observar en la encuesta anterior, 1286 personas han manifestado su opinión acerca de si comprarán o no un reloj inteligente. La respuesta es clara, un 34,91 por ciento de los votantes, lo que significa un total de 449 votos, se han referido a que esperarán hasta que sean útiles. Por lo tanto, os animamos a vosotros, los lectores, a que manifestéis vuestra opinión acerca de los smartwatch y que, evidentemente, también reflejéis cuáles son los aspectos básicos que consideráis deberían cubrir estos dispositivos de muñeca.
Fuente: phonearena.com