Sin duda uno de los grandes avances en la tecnología móvil tiene que
ver con la resistencia de los dispositivos. Cada vez más duros, con una
mayor capacidad de tolerar al agua y el polvo, y hasta resistentes a los
golpes o caídas. Por eso no es de extrañar que sucedan historias como
la que contamos a continuación.
Ha sucedido en Suecia, y a través de la publicación en Facebook de una persona, sabemos que un modelo de Nokia Lumia 800 ha estado la friolera de tres meses sumergido en un lago,
y al ser rescatado seguía funcionando. Totalmente sorprende, pero
cierto, si atendemos a los detalles que aporta este usuario, que además
añade una fotografía del estado en el que ha quedado el dispositivo.
El Nokia Lumia 800 en cuestión se había quedado
atrapado en las rocas cerca de la orilla, y en una pequeña bajada de
agua, se pudo rescatar el terminal. La sorpresa fue mayúscula al poder
comprobar la fiereza de este dispositivo que más de tres meses después seguía en funcionamiento.
El resultado
Tras comprobar que, sorprendentemente el Nokia Lumia 800 seguía vivo, lo primero que hubo que hacer fue limpiarlo, ya que el terminal estaba lleno de algas y tenía incluso varias conchas adheridas, como es lógico. Después de ese proceso de limpieza, la persona que se encontró el móvil lo dejo secar durante varios días, y posteriormente, confiando en la dureza de estos smartphones, lo puso a cargar.Tras llevar a cabo una carga completa, el resultado es que la batería funciona perfectamente y tiene una autonomía de 48 horas, aproximadamente lo mismo que tenía antes estando en funcionamiento.
De ser cierta toda la historia que relata esta persona, parece que desde Nokia ya tendría mucho terreno ganado a las nuevas tendencias que hay para los terminales que pueden sumergirse o ser mojados. Si ha aguantado 3 meses, qué no podrá hacer si se lo toman en serio.
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